lunes, septiembre 29, 2008

Habitación 1408


Mike Enslin (John Cusack) es un escéptico escritor de una serie de libros que trata sobre casas, castillos y edificios embrujados y está a punto de sacar su nueva edición: Hoteles Embrujados de los Estados Unidos.

Ahora que está por terminar el libro, recibe una postal anónima que lo invita a investigar sobre la Habitación 1408 del Hotel Dolphin de la ciudad de Nueva York, de la cual, según se dice, todo el que entra muere con un final trágico y horroroso.

Mike se dirige de inmediato a Nueva York, donde a pesar de todas las advertencias, súplicas, intentos de chantage y demás tácticas fallidas de Gerard Olin (Samuel L. Jackson), quien administra el Hotel, está dispuesto a pasar una noche e investigar los supuestos fenómenos y espantos de la habitación y a demostrar que no son más que trucos publicitarios del Hotel.

Crítica

Muy tenebrosa, estresante, llena de suspenso y buenas actuaciones. Yo no me puedo quejar porque me di mis cuantos sustos, solté unos cuantos alaridos y me dio taquicardia del suspenso en algunos momentos.


Adoro los cuentos y libros de Stephen King (especialmente donde los protagonistas son escritores) y este film basado en uno de sus relatos no me decepcionó, como tampoco lo hizo la actuación del excelente John Cusack.

2 comentarios:

Rosa dijo...

No he tenido oportunidad de leer a Stephen King...dime, ¿cuál de sus novelas me recomiendas?.
A mí me encanta esto de las casas embrujadas, y de desentrañar cuánto de real hay en esto. Sabes siempre he pensado que todo o casí todo puede resolverse de forma racional...pero siempre queda algo que la ciencia no puede explicar.

Otra que no dudaría en ver.

Dalia dijo...

pues amiga, yo no he leido muchas de King y mira que tiene cientos!!!! escribe demasiado este autor!, pero de las que he leido, la que mas me gusto, me tenia loca y no me dejaba dormir es Un Saco de Huesos.

La pelicula a mi me encanto, si te gustan las casas embrujadas esta habitacion la disfrutaras. Yo como me asusto con poco pegue unos cuantos brincos, algun halarido y me rei que dio gusto despues.